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Walter Poplawski, uno de los accionistas de la empresa con sede en Buenos Aires, señaló que «este despliegue en materia comercial se complementa con las inversiones en infraestructura del warehouse, en equipamiento y mejoras en los procesos productivos, logísticos y de calidad».

La compañía, líder en producción y comercialización de miel desplegó durante este año una intensa actividad en el exterior. Totalizaron siete las misiones comerciales realizadas en el exterior, profundizando el perfil exportador de una compañía que desde 1958 mantiene alta presencia en el mercado.

«Todo esto nos consolida como una empresa que está en línea con los requerimientos internacionales». Argentina es un país productor de aproximadamente entre sesenta y ochenta mil toneladas por año. Mantiene una importante presencia en el mercado internacional de la miel, junto a India, China, México, Brasil y Europa del Este.

Un dato significativo es que Argentina no es país consumidor de miel y se exporta más del noventa y cinco por ciento de la producción. El desafío como sector es incorporar valor agregado a la materia prima, dando más empleo y logrando mayores beneficios.

A nivel mundial existen dos grandes compradores: Estados Unidos y la Unión Europea, mercados de alto consumo y donde se le agrega valor llegando a las góndolas de los supermercados, la industria alimenticia, farmacéutica y cosmetología.

El objetivo de Villamora es consolidar su presencia en el mercado internacional, afianzando sus relaciones comerciales y demostrando compromiso de permanencia, calidad, cumplimiento y la construcción de vínculos de largo plazo.

Satisfacer las necesidades de sus clientes implica para Villamora ofrecer mieles de todos los orígenes mundiales para sus distintos usos. En este sentido, mantiene una presencia activa en las ferias específicas del sector y aquellas en las que los actores principales son quienes utilizan la miel como un insumo industrial. En los últimos años llevó acciones comerciales directas en Estados Unidos, en el camino de establecer relaciones con los packers e industrias que demanda esta materia prima.

La estrategia comercial es integrar verticalmente el negocio, ampliando el volumen de operaciones mediante la incorporación de nuevos proveedores locales, entre ellos, productores, acopiadores y cooperativas, pero también, sin descartar la provisión por medio de otros exportadores.

Otro objetivo para la empresa es trabajar en la trazabilidad, para lo cual se desarrollan acciones conjuntas entre autoridades, productores, acopiadores y exportadores. El objetivo en los próximos cinco años es llegar directamente a los packers e industrias que forman la demanda con un volumen de diez mil toneladas. También, trabajar fuerte en la actualización y modernización de procesos, integrar una red de productores y proveedores para ayudarlos con la trazabilidad y validación de normas internacionales de calidad. Actualmente, además de todas las certificaciones internacionales con la que ya cuenta la empresa, se encuentra en proceso la validación de normas ISO, y para el 2017 se proyecta la se ampliación de oficinas, laboratorios y depósitos. Se construirán mil metros cuadrados y se solicitará a Aduana la autorización para hacer los trámites aduaneros en las instalaciones propias. Un elemento clave para todo este proceso es apoyo crediticio del Banco de la Provincia de Buenos Aires y el Banco Galicia, quienes, con créditos promocionales y de fomento a las exportaciones, impulsan la actividad. También es importante el apoyo de la Fundación Exportar y del CFI, entidades con presencia activa en la actividad. Las siete ferias El calendario de actividades en materia de comercio exterior comenzó en enero de 2016 con la misión a Estados Unidos a cargo de Claudia Oliver y Daniela Finocchiaro, que incluyó varios destinos como Chicago, Nueva York y Miami. Se establecieron nuevas relaciones comerciales y contactos con el sector importador.

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