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Una de las principales ventajas del mercado ruso es que tiene un fuerte potencial de crecimiento y aún puede presentar muchas oportunidades comerciales y de inversión.

Rusia forma parte del grupo de las principales economías emergentes del mundo (BRICs). El nivel de crecimiento y tamaño de su economía, junto con otras características de consumo y su incorporación a la Organización Mundial del Comercio, permiten desarrollar una serie de oportunidades para la Argentina que lograrían incrementar el monto exportado a este mercado e inclusive, abren un espacio para el análisis futuro de atracción de inversiones, como está sucediendo en la actualidad.
Esto indicaría un análisis positivo para nuestro país en cuanto a las oportunidades de incrementar nuestras ventas hacia ese mercado y fortalecer los vínculos existentes, sobre todo, teniendo en cuenta que poseemos una considerable ventaja comparativa en las exportaciones de productos apícolas.
Para facilitar estos objetivos, la Secretaría de Mercados Agroindustriales, a cargo de la licenciada Marisa Bircher, está abriendo oficinas agrícolas en países como Rusia e implementando acciones de promoción comercial. De esta manera, se apunta también a negociar preferencias arancelarias. El objetivo es revitalizar el mercado y retomar la negociación de los aranceles.
La bandera de la miel argentina tiene peso en los mercados internacionales. Es, de hecho, muy demandada por la calidad que
reconocen y valoran los países con mayor consumo de este producto.
Según lo informado por la Cámara Argentina de Comercio (CAC) a través de un relevamiento hecho en base a datos del INDEC, las importaciones de productos rusos cayeron 16 %, al tiempo que las exportaciones argentinas a ese destino crecieron 5 % en los once primeros meses de 2017.