Avance desparejo de la cosecha en Santa Fe

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Avance desparejo de la cosecha en Santa Fe

«Conversamos con Viviana Bruno de Ceres en Santa Fe quien nos cuenta en detalle cómo viene la cosecha en esa provincia y cómo se ven afectados los rindes por causa de la sequía»

Viviana, ahora sí estamos como para comenzar el informe de esta temporada 2017/2018.

En realidad, vamos a transportarnos al mes de agosto, cuando comienza el aporte del monte. El año pasado, no hubo un aporte como en otros años, es decir que ya arrancamos mal; te hablo del algarrobo, del espinillo, del chañar, pero, así y todo, la colmena, en la primavera, se fue preparando. Hubo que alimentarla un poco, pero estaba bien organizada y con buena reserva.

Hacia octubre, nosotros veíamos que, si el clima acompañaba, iba a ser una buena cosecha. En noviembre, no llovió prácticamente nada, y parecía que la cosecha iba a ser muy mala, pero, como esto siempre nos sorprende, no fue tan mala como nosotros pensábamos o imaginábamos, sino que fue muy despareja. Por un lado, por zona: es decir, apiarios de sesenta kilogramos e, incluso, mayores, y apiarios de veinte o quince kilogramos. Por otro, fue despareja dentro del mismo apiario, con colmenas muy buenas, buenas, malas y colmenas zanganeras dentro del mismo apiario.

En algunos campos, este fenómeno fue más notorio que en otros; de todos modos, si tuviera que darte un promedio, te diría que habría que hablar, tal vez, de unos veinticinco/treinta kilogramos, pero en esto siempre hay una cuestión que debe considerarse. Los propietarios de colmenares más chicos en diferentes campos pueden haber tenido la suerte de un promedio mejor, dentro de los veinticinco/treinta kilogramos, pero el apicultor chico, como abunda en esta zona —acá no hay apicultores grandes: hay chicos y medianos, que tienen colmenas en un solo campo—, es un caso diferente. Supongamos que este apicultor tiene cien colmenas en un solo campo; si esa zona fue mala, no llega a los veinte kilogramos.

Por esta razón, para poder darte datos más precisos, he hablado con la gente que está con los técnicos de Cambio Rural para saber qué promedio veían ellos, ya que yo no tengo una devolución de la gente. Te podría decir que la zona que vos conocés (Tostado, Antonio Pini, Pozo Borrado) fue peor que esta. Es una zona que siempre funciona muy bien, pero este año fue muy floja en el quilaje. Por un lado, las zonas más altas fueron las que padecieron la sequía y las que tuvieron menos oferta floral, pero, por otro lado, fueron los lugares donde había alfalfa, una alfalfa con buen desarrollo radicular. A pesar de la sequía, hubo un buen aporte de alfalfa.

El tema del aporte del girasol fue variado. Se veían apiarios que iban al girasol, y otros que estaban a la vuelta del girasol, y no había casi nada de recolección de girasol. Hubo mucho girasol, pero también hubo mucha sequía en su período de floración.

Otro factor importante que se observó es que vuelve a aparecer y a incrementarse la superficie del melilotus, que era muy significativo tiempo atrás, cuando el desarrollo de la ganadería era otro. Luego, llegó la agricultura, y la cantidad de melilotus se redujo de manera notable: prácticamente, dependíamos de la alfalfa, del girasol y del monte. Bueno, eso viene en aumento, pero este año no generó ningún aporte o casi ninguno. Sin embargo, en las zonas cercanas al río Salado hubo aportes del néctar de melilotus, pero, a pesar de que había potreros hermosos muy florecidos, no se veía la abeja en la flor. El melilotus necesita mucha humedad para que la abeja pueda recolectar el néctar, o sea que el clima estuvo muy seco para el melilotus en general.

Este es un resumen de lo que sucedió. En diciembre, la cosecha empezó tarde, y todo se desplazó, incluso las ventas que se realizan durante la cosecha (generalmente, en enero, la gente está vendiendo, se arman lotes). Los productores comenzaron a movilizarse en diciembre —un mes más tarde—, cuando la cosecha debería comenzar en esta zona a mediados de noviembre. Este es el panorama aproximado. Yo creo que uno siempre espera un poco más —el tema de relacionar los kilos, ver el precio, los costos—, pero hubiese podido ser una cosecha mucho más floja en función de la sequía tremenda que estamos atravesando.

– Viviana, quisiera hacerte un par de consultas. Una de ellas se refiere a algo que dijiste en la anterior respuesta sobre los apiarios muy desparejos entre sí y las colmenas. En el diálogo que mantuviste con ese productor o, tal vez, si has mantenido algún otro con los técnicos, ¿te enteraste del motivo? Es muy llamativo que una colmena sea muy buena, y otras, no

 No he hablado de este tema en particular con los técnicos, pero esto le ha ocurrido a gente a la que le pondría un diez por la forma en que trabaja porque los conozco y sé cómo trabajan en el recambio de reinas, si se hacen traslados, etc. Por otra parte, existen otros apicultores que dejan que la abeja trabaje como quiera. En general, algunos productores manifestaron su opinión sobre este tema un poco más; otros, no tanto, pero es un hecho que los apiarios estuvieron desparejos. Yo no sabría decirte, Federico, si los técnicos le atribuyen esta situación a algo en particular o al mismo fenómeno de la sequía. No sé si eso podría brindarnos una explicación sobre cómo se presentaron los apiarios. En realidad, fue muy raro encontrar apiarios parejos, como otros años o como el año pasado, que fue mejor. No sabría darte una respuesta.

Otra cuestión que debemos considerar es que todos los años hay mortandad por la aplicación de agroquímicos. Siempre hay algún apicultor o varios afectados en la totalidad o en parte del apiario. Es algo contra lo que se lucha porque, cuando uno hace la declaración de colmenas que están en las coordenadas, hay aplicadores que buscan la información, pero, evidentemente, hay otros que no lo hacen. Además, cuando surge la necesidad de llevar a cabo un tratamiento, todos tienen que hacerlo, y el problema es que las aplicaciones se hacen en horarios en los que no deberían hacerse. Muchas veces, vos estás en los apiarios y ves los aviones que están volando a las diez de la mañana. Creo que es una lucha que se da en todas las provincias y en todos los lugares.

Con este tema de los agroquímicos, respondiste la pregunta que te iba a hacer.  Para cerrar el reportaje, aprovecho que estamos grabando esta nota en febrero de 2018 para preguntarte si queda algo por delante de la temporada en alguna zona cercana o ya se termina.

Sí, en realidad, como viene todo atrasado, la mayoría de la gente no ha terminado. Los apicultores conocidos no han bajado todavía a cámara y no han hecho la curación de varroa, que también viene atrasada. Queda un remanente de miel, pero ya es muy chico en volumen; todavía no se ha terminado. Son muy pocos los apicultores que han bajado todo a cámara e hicieron la curación o están programando curar. No perdemos las esperanzas de que en marzo llueva, si no llueve en febrero, para que se puedan hacer posturas porque el mes de marzo y la primera quincena de abril son fundamentales para la alfalfa, para el melilotus, para pensar en las posturas para la próxima cosecha. Actualmente, estamos esperanzados de que llueva en algún momento para beneficio de toda la gente porque esta es una zona que vive del sector agropecuario directa o indirectamente, y la totalidad de la gente está afectada. Si al campo le va mal, se para la economía de la zona. Lamentablemente, esto es así.

Bueno, Viviana, te agradezco el reportaje para Infomiel.